Salimos de la Palma dirección Bargas. Nada más salir Solete
nota baja presión en su rueda trasera y se para a inflar el neumático, esto
hace que se pierda la primera anécdota de la jornada. Según los testigos, al
llegar a Mercadona, Flavio y Valen están inmersos en animada conversación,
cuando el primero de ellos coge un bordillo, le derrapa la rueda y se precipita
sobre el de Velada, ambos besan el suelo. Pese al dolor manifiesto de Flavio,
gracias a Dios todo queda en anécdota y proseguimos ruta dirección al punto “VERDE
QUE TE QUIERO VERDE” de Iberdrola.
Cruzamos la carretera de Torrijos por el puente de acceso a
la Subestación de Iberdrola y bajamos
por la cuesta del vertedero, recordamos antiguas lesiones de Josito y
acontecimientos con el Actimel de Flavio. Al final de la bajada, giramos a la
izquierda para llegar a la planta de áridos de Lozoya desde donde vemos la Ciudad
Imperial, hacia donde nos dirigimos y donde entraremos por la espalda de
Tabordo, debajo del puente de la Peraleda.
Cogemos la vereda del Tajo, pasamos por detrás de la Universidad y al llegar al puente de tirantes que sustituye al antiguo acceso (creo que usado para el suministro de materias primas y/o balas) a la Fábrica de Armas desde la carretera de Navalpino, decidimos cruzar ese puente y buscar salida por el parque al lado de la Olivilla. Las vistas de Toledo y el Cigarral del Ángel Custodio son espectaculares y se realiza reportaje fotográfico del evento, no sin el correspondiente cachondito de Perico haciendo referencia al miedo que muestra Solete a las alturas.
Al llegar a la puerta del parque nos encontramos que ésta
está cerrada y toca dar marcha atrás. Cogemos de nuevo la vereda del río dirección
a la Puerta del Cambrón, pasamos el estrecho pasaje de la central de fuerza
sobre el río y antes de llegar al puente que nos llevará al Pº de Recaredo, nos
encontramos un pantalón VERDE QUE TE QUIERO VERDE simpático que nos saluda
efusivamente y a la que el grupo corresponde, sin malicia alguna dicho sea de
paso. Sufriendo unos más que otros subimos a la Puerta del Cambrón, donde la
noche anterior ha debido haber un botellón y podemos ver las secuelas de éste.
Juanma y el Litri no quieren irse del lugar sin marcar el territorio, puestos
en paralelo mirando hacia la Fábrica de Armas y como no podía ser de otra
manera pistola en mano, el Litri hace reflexión artística ideal para el
momento: “¡Pero qué bonito es Toledo!”
Debió ser por la acertada reflexión del Litri en compañía inestimable de Juanma, haciendo bueno el dicho de “P…. española, no mea sola”, por lo que nos decidimos convertir nuestra ruta biciclista en ruta bicilista monumental, a partir de aquí visitaremos monumentos como: Puerta del Cambrón, San Juan de los Reyes, Sinagoga del Tránsito, MARUXIÑA LOUNGE (lugar de referencia del ocio toledano a partir del 19 de junio del presente), Catedral, Academia de Infantería, Puente de Alcántara, …
Debió ser por la acertada reflexión del Litri en compañía inestimable de Juanma, haciendo bueno el dicho de “P…. española, no mea sola”, por lo que nos decidimos convertir nuestra ruta biciclista en ruta bicilista monumental, a partir de aquí visitaremos monumentos como: Puerta del Cambrón, San Juan de los Reyes, Sinagoga del Tránsito, MARUXIÑA LOUNGE (lugar de referencia del ocio toledano a partir del 19 de junio del presente), Catedral, Academia de Infantería, Puente de Alcántara, …
A estas alturas hemos perdido dos componentes del grupo como son Josito con molestias en un gémelo y Juanma de reclutamiento de Diego su buen samaritano y futuro miembro del grupo MTB Haciendo Hueco. Por la vereda del Tajo de nuevo buscamos el antiguo puente de ferrocarril que nos llevará a Azucaica, se producen los usuales demarrajes de Perico a los que responden el Litri y Flavio. Cruzamos el Barrio de Azucaica y nos dirigimos a la subida a la Urbanización San Francisco donde cada uno hace lo que puede, sabiendo que al final de la cuesta nos esperará el grupo y un poco más allá unas salchichas gourmet, que no tienen comparación con el propietario del merendero donde las sirven.
Antes de llegar a Kaito en la bajada se produce una caída de Ángel que inaugura su casillero de aterrizajes, afortunadamente sin consecuencias graves. Desde aquí nos queda llegar como podemos a la Palma, esta vez cruzando el puente de Incarlopsa sobre la A42. Han sido unos 45km entretenidos, de risas, de monumentos, de aterrizajes que podían haber sido más de lo que fueron, de buen rollo, …, de puentes (9)
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