15 MARZO: De furtiveo por Mazarabeas

Durante la semana Solete anuncia la ruta del sábado, que se hará por Mazarabeas bajando el curso del río Guadarrama. La marcha parece atractiva o al menos eso parece, ya que nos congregamos 10 biciclistas, siendo la salida más numerosa de lo que llevamos de 2014. Entre los diez damos la bienvenida a una nueva incorporación, se trata de Sergio, el cual y debido a su tobillo fino, despierta los primeros temores del día.

Salimos de la Palma, dirección a Bargas, dejamos el Mercadona a la derecha por el camino del punto limpio (Camino de Coches) y pedaleando llegamos a la antigua carretera de Torrijos.

En la carretera disfrutamos de una estampa inigualable, se trata de Perico que igual que el segoviano nos deleita con un estilo depurado en la bajada. Se nota que es un hombre de peso dentro de nuestro grupo.

Entramos en la finca de Mazarabeas y bajamos al río, donde después de andar 1km bordeando el Guadarrama divisamos al guarda bajando por el Arroyo de la Loba, toca parada, "nos habrá visto?, no nos habrá visto'", "esperad a que se vaya", "venga que ya se ha ido"; dejamos de ver al todoterreno y seguimos ruta siempre siguiendo el curso del río

 Llegamos al final de la finca y saltamos a la siguiente (creo que se trata de Bergonza). Salimos de ésta última finca y nos incorporamos al camino de Albarreal, cruzamos el río y en el primer camino que nos encontramos a la derecha cogemos dirección a Rielves, donde nos encontramos caminos con mucha arena. Dejamos el camino y giramos a la derecha, cruzamos el Arroyo de Rielves y nos dirigimos a la Finca la Querencia donde saludamos al paisano de la puerta y seguimos hasta cruzar la carretera de Torrijos por el camino de Albarreal.

 

  

Cruzamos la Autovía de Torrijos por el camino de Albarreal y nos encaminamos hacia Villamiel. Toca meternos unos con otros, se le da caña a Perico y éste reparte lindezas por doquier. En el llano Lucio es un crack, hasta llegar a cruzar la vía del tren donde el crack es Moi y su técnica impresionante.

 

De esta manera llegamos a Villamiel, cruzamos el pueblo, Perico indica a Sergio donde se encuentra la "Masía" (que raro, nunca lo había dicho). Al salir de la población Moi pasa de un lado del camino al otro y se lleva en su tubular un pincho que hubiese pinchado la rueda de un tractor.

 

Una vez reparado el pinchazo toca subida del Loranque donde cada uno sube como puede encabezando el grupo Franco que se encuentra en una forma envidiable.

 

Para más detalles de la ruta, pincha aquí